sábado, 12 de marzo de 2016

ACEITE ESENCIAL DE LAVANDA



El aceite esencial de lavanda es el más conocido de todos los aceites esenciales debido a su versatilidad. Es muy activo en cuanto a beneficios y propiedades. Si alguna vez no sabes por cuál decidirte, sin duda te recomiendo que sea éste.
Lavandula officinalis es su nombre científico. La lavanda es una planta originaria de la región mediterránea, tanto por África como por Europa. El arbusto se caracteriza por tener espigas en sus ramas. Las flores moradas nos armonizan con un aroma muy sutil y agradable. El aceite se obtiene mediante su destilación.
Hay que decir que antiguamente este aceite esencial ya era empleado como aceite terapéutico, así como en tratamientos de belleza milenarios y como un perfume distinguido.
El aceite esencial de lavanda se caracteriza precisamente por ser uno de los que más propiedades nos ofrecen para el bienestar personal. Es versátil y ambienta nuestro ecosistema como ningún otro. Si te acercas a alguna persona aficionada a la aromaterapia, seguramente sea el que más te recomiende.

¿Cuáles son las propiedades del aceite esencial de lavanda para la salud y la piel?

Para nuestra salud

  • Acción relajante. El aceite esencial lavanda actúa como sedante. De hecho, este uso se conoce desde hace siglos y ya era aprovechado por el Imperio Romano. Con ello conseguían evitar la depresión y los problemas para dormir.
  • Es un gran antiséptico. Actúa eficazmente contra microorganismos bacterianos y fúngicos. Es un remedio natural frente a infecciones. No obstante, no siempre resulta efectivo y conviene acudir a un especialista antes de comenzar un tratamiento con aceite de lavanda.
  • Antiinflamatorio. Contrarresta los efectos de la inflamación, así como del dolor muscular.
  • Combate problemas dérmicos tales como el acné o la psoriasis. También ayuda a regenerar la dermis después de quemaduras, ya que activa el metabolismo celular. Otras recomendaciones de dermatólogos es su uso para paliar los síntomas de la dermatitis. Hoy en día esta enfermedad es una incógnita para el mundo científico, ya que cuesta explicar por qué puede afectar tanto sobre el estado emocional del paciente. Al parecer, el aceite esencial de lavanda tiene un buen efecto sobre todas las afecciones mencionadas, actuando como calmante.

Para nuestra piel

El aceite esencial de lavanda no solo es beneficioso para nuestra salud, sino también para nuestras rutinas de belleza. Es muy parecido al aceite de rosa mosqueta o al aceite de almendras, con la diferencia de que no es únicamente un aceite vegetal, sino esencial. Además, presenta otras propiedades para el cabello y la piel.
  • Previene la formación de arrugas. Lógicamente ningún cosmético va a terminar con las arrugas definitivamente, pero sí es cierto que existen diferentes tipos de ingredientes cosméticos, unos más eficientes que otros, y el aceite esencial de lavanda es uno de los mejores que puedes encontrar. La razón de que sea un buen preventor de los signos de la edad es que tiene una capacidad regeneradora que no posee ningún otro aceite esencial.
  • Activa el metabolismo de los tejidos. Igual que se aplica con las quemaduras, también es útil en tratamientos de belleza natural. La lavanda contribuye en la regeneración activa del tejido para mantener la piel lo más joven posible.
  • Aporta un extra de hidratación. El agua es esencial para que una célula se mantenga sana, ya que interviene prácticamente en todas las rutas metabólicas esenciales

Aceite esencial de lavanda para el cabello

La lavanda deja un aroma especial cuando lo empleamos en cuidados capilares. Ayuda a recuperar el pelo dañado y a alisarlo si añades unas gotas sobre tu champú habitual.

En nuestra higiene

Puedes realizar baños aromáticos en tu casa a partir de la lavanda. Como resultado, no solo tendrás un buen olor, sino que habrás desinfectado todo tu cuerpo. Te sentirás en un manjar de dioses y te olvidarás de todos tus problemas, debido a la sensación de relajación que otorga lavanda. Es recomendable combinar el baño con música que nos guste para relajarnos.

Para los piojos

Si tus niños tienen piojos, en vez de darles un producto agresivo, prueba primero con el aceite esencial de lavanda o de árbol del té para combatirlos. Suele ser bastante efectivo y además no es un producto que pueda dañar su pelo. Si tu mascota tiene pulgas también puedes aplicarle unas gotas diariamente.
En nuestra higiene
  • Puedes realizar baños aromáticos en tu casa a partir de la lavanda. Como resultado, no solo tendrás un buen olor, sino que habrás desinfectado todo tu cuerpo. Te sentirás en un manjar de dioses y te olvidarás de todos tus problemas, debido a la sensación de relajación que otorga lavanda. Es recomendable combinar el baño con música que nos guste para relajarnos.

    Para los piojos

    Si tus niños tienen piojos, en vez de darles un producto agresivo, prueba primero con el aceite esencial de lavanda o de árbol del té para combatirlos. Suele ser bastante efectivo y además no es un producto que pueda dañar su pelo. Si tu mascota tiene pulgas también puedes aplicarle unas gotas diariamente.
COMO HACER ACEITE DE LAVANDA CASERO




  • Para hacer aceite de lavanda casero necesitarás flores frescas de lavanda. Si tienes una mata de lavanda en casa y se ha estropeado un poco o incluso florecido, no te preocupes porque estas flores también sirven.
  • Pon todas las flores en una taza o cualquier otro recipiente y déjalas secar al sol durante unas horas. Es muy importante que el lugar donde las dejes sea seco, es decir, aunque de la luz directa del sol no debe hacer calor.
  • Para seguir con la preparación del aceite de lavanda casero, necesitarás aceite de almendras, que puedes hacer tú mismo. Si no tienes los ingredientes para hacer aceite de almendras, el aceite de oliva también sirve, pero ten en cuenta que el resultado final no será tan bueno, porque el aroma de lavanda no será tan intenso.
  • Cuando las flores de lavanda estén bien secas, machácalas un poco con un mortero. No las tritures demasiado porque pueden perder su esencia.
  • Luego, introduce el aceite de almendras en una olla o cazo, 3 tazas de aceite por 1 de flores de lavanda. Si prefieres un olor menos intenso, añade 2 tazas de aceite en lugar de 3. Si las flores no están en una taza, intenta coger un recipiente del mismo tamaño para las medidas del aceite de almendras.
  • Calienta el aceite de almendras a fuego lento. Cuando el aceite esté caliente, añade las flores secas de lavanda y deja la mezcla en el fuego durante 2 o 3 horas.
  • Después, deberás colar el aceite, meterlo en un frasco con tapa y guardarlo en un lugar oscuro para que no le de la luz y lo estropee.
  • ¡Y listo! Como ves esta es una forma muy sencilla de hacer aceite de lavanda casero. Con esto no conseguirás un aceite esencial como el que venden en las perfumerías, puesto que para ello se requiere de un proceso mucho más largo y complicado. No obstante, el resultado es bastante satisfactorio y con él puedes hacer jabon de lavanda, o utilizarlo para dar masajes o ambientar tu hogar. .



  • OTRA FORMA DE HACER ACEITE DE LAVANDA





  • Receta para hacer tu propio aceite de lavanda

    Necesitarás flores de lavanda fresca que producen la mejor fragancia aunque también puedes utilizar los recortes de plantas de lavanda, como las hojas de lavanda y los tallos. Debes tener unos 2 a 4 tazas de lavanda. Puedes usar las tijeras para cortar los tallos y hojas en trozos manejables para encajar en el frasco. . Cortar a unos 1-2 centímetros de largo o más pequeño.

    Lo que necesitarás para hacer tu aceite de lavanda

    • Un recipiente de vidrio grande con una tapa que cierre bien, a rosca sería lo ideal.
    • Un aceite portador que tenga un color pálido y aroma suave como para no competir con el poder de la lavanda
    • Un colador de malla fina o un pedazo de gasa para colar el material vegetal
    • Una botella de vidrio oscuro (azul o ámbar) con un tapón para el almacenamiento del producto terminado

    Método para hacer aceite de lavanda

    Coloca la lavanda en el frasco de vidrio y llénalo con el aceite elegido. Pon la tapa en su lugar y preservar el frasco en un lugar cálido para “colar” agitando periódicamente para mezclar. Deje reposar por lo menos 48 horas, aunque un día extra no le hará daño al proceso. La lavanda aceite se sentirá atraído por su aceite base y crear una lavanda aceite de infusión.
    Tendrás que dejar que se asiente durante la noche. Deberás colar el material vegetal mediante el filtro o gasa exprimiendo todo el aceite que pueda antes de colocar más material vegetal en el frasco. Tendrás que repetir este proceso 2 a 3 veces o más hasta que el aroma deseado se consiga. Guarda el aceite de lavanda en la botella de vidrio en un lugar fresco y oscuro para preservar sus propiedades saludables. El aceite de lavanda debe durar hasta un año si se almacena correctamente.



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